domingo, 20 de enero de 2002

EGIPTO - CAP 6/13: Rumbo sur

Aswan, Egipto – sábado 19 de enero de 2002


“El hombre teme al tiempo,

pero el tiempo teme a las Pirámides”

Napoleón Bonaparte
 




El jueves recorrimos Saqqara con su Pirámide Escalonada y su complejo de Nuevas Tumbas, Dahshur y Menfis donde visitamos el Museo Mit Rahina y luego partimos en un tren hacia Aswan, la ciudad más austral de nuestro itinerario.  

Por suerte, al estar más cerca del Ecuador, es más cálida.  El viaje se inició a las 19hs y gracias a un descarrilamiento de otro tren, las paradas en las estaciones eran de una hora, por lo que estuvimos 19hs en ese escondrijo.  Esto nos permitió ver las afueras de la ciudad y sus costumbres.

Los barrios más bajos tienen una característica distintiva: de sus casas sobresalen hacia arriba columnas de hormigón y varillas de hierro que dan la impresión de que un piso superior está en construcción.  En realidad esto se hace a propósito porque las casas no terminadas no pagan impuestos.  Imaginen barrios enteros que en vez de tejas terminen en columnas y fierros retorcidos.  Otra característica de los techos es que sirven como depósito de chatarras, entonces uno puede ver camas viejas, cajones, botellas etc.  También en ocasiones se lo utiliza como corral de cabras, aunque usted no lo crea.  Al no existir un sistema de recolección de basura se arman basurales improvisados en cualquier parte. 

Basura sobre los techos en El Cairo

Saliendo de la zona urbanizada, ingresamos a la zona agrícola donde cada centímetro de tierra es un cultivo distinto.  Las parcelas son irrisoriamente pequeñas.  Justo es época de recolección de tomates, así que en todos los campos se veía la gente recolectando y canastas rojas apiladas a un costado.  No pudimos fotografiarlo pero el paisaje es como esos que publica National Geographic  También hay enormes repollos, lavanda, alfalfa y caña de azúcar.  El riego es a través de canales y los cultivos se encuentran debajo de frescos palmerales.  Esta franja fértil es estrecha y acompaña al Nilo en toda su extensión, pero sus costados terminan abruptamente sobre el desierto.


Acá en Aswan fuimos a una iglesia Copta.  Los Coptos son una pequeña colectividad de cristianos que se dicen descendientes directos de los antiguos faraones.  Por primera vez sentí que debía avanzar con cautela como si caminara sobre suelo minado, pero ellos nos detectaron en seguida, nos dieron la bienvenida y nos invitaron a conocer su iglesia que es doble: una sobre la otra, ambas de tamaño monumental.  Nos contaron que tienen el permiso de la religión musulmana para construir iglesias pero su altura no puede ser mayor a la mezquita de la zona.  

El gobierno no les da dinero para la construcción (obviamente sí a las mezquitas) por lo que deben juntarlo ellos mismos (habló de unos cuantos millones pero no recuerdo cuántos).  En las afuera hay un cementerio musulmán cuyas tumbas se señalan con una capillita cuyo techo tiene forma de bolita de helado.  El material que usan para construirlas es ladrillo de barro tosco, por lo que están todas destruidas convirtiendo al cementerio en un lugar recontra polvoriento y seco.  Esta es zona militar y tengo mucho para contarles al respecto.

Como verán, otra particularidad de estas ciudades es que uno encuentra más fácil una PC que un teléfono.-



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